En Francia, el 46% de las mujeres mayores de 50 años ya no tienen relaciones sexuales...
Lo hablamos?!?!
No, pero en serio, no sé si tengo ganas de llorar o de gritar... porque faltaba poco para que entrara en el porcentaje... jo...

Entonces, ¿qué es esto de ponerse viejo, envejecer? ¿A qué edad empieza?
¿Realmente tiene que ver con la edad? ¿O con lo que proyectamos como relativo a la categoría viej@s?
Echaremos a lo que salga la decrepitud física (ya no se me levanta como antes, ya no me mojo, es menopausia, mi cuerpo empieza a colgar por todos lados), el cambio de disposición mental (ya no follo más, no me interesa, ya no me gusta la gente, es cosa de jóvenes).

¿Estamos dispuestos a envejecer porque estamos predispuestos a ello por nuestra sociedad y, por tanto, por nosotros mismos?

Básicamente, la vida es gratis hasta los 40 años, luego te manda las facturas… Ahhhh sí, fumé demasiado, bebí demasiado, festejé demasiado, tenía demasiadas preocupaciones y ahora se nota en los surcos de mis arrugas y en mi cabeza calva, no hice suficiente deporte, no bebí suficiente agua...
BUENO. Es un clásico. Pequeña crisis de la mediana edad para reposicionar sus ejes, unos años de transición para rectificar la situación y poner en marcha un nuevo plan antes de la jubilación.

Tenemos dos opciones disponibles:

1- Estilo siglo XIX en cuál la vida pronto terminaría así que me rindo y me dejo inclinar hacia el lado que he seguido hasta entonces (y lo exacerbo): en el mejor de los casos la alegría de vivir y la benevolencia, así nacen los abuelos simpáticos, y en el peor de los casos « La vida es una putada » y me hundo en la amargura y la crítica, así nacen los viejos quejones y agrios. Sí, porque como la vida es como yo creo que es, esta me lo devuelve (porque se siempre se nos cumple), entonces cuanto más pienso que la vida es así porque más pruebas tengo, más gruñón soy...
Y me quedo esperando que eso suceda, me quedo con el buen viejo modelo del anciano que con resignación mira como su cuerpo se va a la mierda (¡ah mi buena señora, ya no tenemos más veinte años!).

2- Voy con la versión siglo XXI en cual soy consciente de que mi cuerpo ya tiene necesidades distintas y me pongo las pilas y hago lo que haga falta para rendirle homenaje, ya que me cumpló gratis desde hace 40 años. Entonces me hidrato la piel, le ofrezco cuidados (quito las manchas y los puerros que van apareciendo), hago más deporte, me permito unos correctivos (un poco de botox por aquí, un poco de ácido por allá), cuido mi cabello (agrego un poco para cubrir mi calvicie, les hago un bonito color, tal vez sólo para resaltar mis canas, de acuerdo con los estándares de belleza que funcionan para mí), cuido el color mis ojos, la blancura y la alineación de mis dientes (ya se comieron la vida, y los cigarros, y el café, y el vino tinto ... 😬), tampoco dejo que me crezca pelo en las orejas. Porque amo este cuerpo y le debo mucho. El punto no es rejuvenecer. Pero seguir siendo hermos@. Nada que ver. En fin, no me dejo caer como un calcetín viejo con el pretexto de que tengo más de 45 años y que de repente me invento que: « Naaah, ya me conoces, ya no necesito seducir, ya estoy por encima de eso...”. pfff...
PUES NO.
Sé que gusto mucho cuando ME gusto, y por lo tanto hago lo que sea necesario para complacerme a mí mism@. No hacer caso a los santurrones que te dirán que complacer es egocéntrico, narcisista e inútil...
PUES NO.
Vamos a dejar de pintarnos de blanco, todos somos así y nos hace bien a todos. Y yo honestamente, lo llamo amor. Vibra bien, vibra alto y trae muchas cosas hermosas a mi vida. Hermosas como yo ☺️

¿Y el sexo?

Te ahorraré las estadísticas de quién folla y quién no y de qué edad y en qué círculos se permite o qué se permite. También te ahorraré el curso de la anatomía sexual que no me importa porque creo que el cuerpo sólo te sirve fielmente lo que piensas en el fondo. Voy a ir mucho más directo: no lo vamos a jugar como en el siglo XIX estilo o tu polla se desliza en mi vagina por sí sola o no hay sexo. Bueno, sí, no es dura, no está mojado, ¿¡¿y qué?!? Vamos. Un poco de poesía y fantasía. Sabemos cómo hacerlo mejor que eso de todos modos. De lo contrario, hay tutoriales en todas partes. Anda ya, ¡A buscar!
Como dijo Einstein: « La locura es siempre hacer lo mismo y esperar que el resultado sea diferente ». Así que comencemos desde hoy y no desde ayer, desde lo que vamos a hacer y no desde lo que ya hemos hecho. Eso lo digo yo, pero os invito a la felicidad.

El cuerpo es este vehículo (movimiento) por el que pasan mis emociones (movimiento). Entonces, ¿Porqué debería dejar de moverse?
Mientras me sienta (me deje) vibrar, sigo siendo capaz de sentir y por tanto de saborear el placer. Placer de los sentidos (a quién le importa si se te sube o no) y del espíritu cuando se mueven dentro mío. El contacto, el otro que me inunda de su deseo, que me acaricia con su amor, con su apetito. Si cuido mi cuerpo porque lo amo, y amo ofrecerlo, el otro también lo recibe como un regalo. Y esto nos mueve.

Lo que pasa es que tendrías que bajarte de tu caballo blanco y quitarte la corona, princesa. Disney sí que ganó mucho dinero, pero a ti poco te aporta... Entonces volvamos a la realidad, dejemos de enfocarnos en la pareja ideal y tomemos lo que encontramos, cuando lo encontramos y donde lo encontramos. (No dije cualquier@, pero más que nada nos damos la oportunidad de sentirnos vibrar). Disfrutamos el momento, apreciamos las cualidades de la pareja que conocemos en lugar de comenzar enumerando todas las razones por las cuales podría no funcionar. Y « funcionar » por cierto, ¿qué significa exactamente « funcionar »? Pasé diez años con mi esposo, montamos un negocio, construimos una casa, tuvimos dos hijos. Todo eso sí que es « funcionar », ¿verdad? El hecho de que no « duró » no significa que no « funcionó » y que hay que tirar el bebé con el agua del baño. Cada etapa vale la pena ser vivida, y me parece un poco limitado que finalmente « funcionar » sólo pueda referirse a morir juntos 🙄
Dejamos que las cosas sucedan a su propio ritmo. Habrá relaciones más o menos estimulantes, pero al menos nos movemos, hacemos circular toda esta energía. Y tal vez un buen día nos encontremos con alguien más. Y tal vez vayamos un poco más allá con él o ella. Y será tremendamente bueno. Por un tiempo... Antes de volver a salir en El torbellino de la vida ...
Pero EN NINGÚN MOMENTO nos damos por vencidos.
La vida es aún mejor después de 50 años cuando te haces las preguntas correctas 😉

Imagen Yul le vieux con